Esta es una receta tradicional de la cocina catalana, proviene de la época medieval y aunque los ingredientes básicos son siempre los mismos he observado que existen dos formas para hacerla, cociendo las espinacas en agua o salteándolas directamente en la sartén.
Como creo que cuanto menos se hierven las verduras más conservan sus propiedades, mis espinacas a la catalana están salteadas directamente en la sartén. Naturalmente para hacerlas así no debéis usar espinacas grandes de tallo duro, os aconsejo las frescas de bolsa que suelen ser tiernas.
Este método tiene muchas ventajas, una de ellas, muy importante, es que la verdura conserva todos sus nutrientes al no perderlos en el agua. Otra ventaja que nos ofrece esta opción es la rapidez con la que se cocinan, en cinco minutos están al punto.
Algunas variantes le añaden beicon o jamón, también es una opción, pero para mí en este plato no es necesaria porque el contraste de sabor entre las espinacas, las pasas y los piñones es la gracia de este plato.
La espinaca es una verdura especialmente interesante, protege el cerebro, evita la úlcera gástrica, combate algunos cánceres, reduce enfermedades oculares...etc... Podéis ver sus muchas propiedades en este enlace: http://mejorconsalud.com/12-beneficios-que-te-aportan-las-espinacas-a-tu-salud/
Ingredientes para 3/4 raciones
600 gr. de espinacas frescas (yo las uso de bolsa, limpias y troceadas)
70 gr. de pasas (sin pepitas)
50 gr. de piñones
3 dientes de ajo
Sal
Pimienta negra molida
Aceite de oliva virgen
Agua o moscatel para hidratar las pasas
Pan de molde para freír
Consejos:
Ya que en mi receta no se hierven las espinacas, sino que se saltean directamente en la sartén, es mejor que elijáis una grande o mejor aún un wok porque crudas tienen mucho volumen aunque enseguida lo pierden al contacto con el calor.
Al no cocerse en agua las espinacas hay que tener cuidado con no pasarse de sal, porque ésta potencia su sabor y pueden quedar demasiado fuertes.
Elaboración:
Comenzamos poniendo las pasas a hidratar, no es imprescindible, si vas con prisa y las pones directamente tampoco pasa nada, pero quedan más suaves si se hidratan. Se puede hacer con agua o en un vino dulce como el moscatel y con 15 minutos es suficiente.
Mientras, le damos un agua a las espinacas por si quedase algún resto de tierra y las dejamos escurriendo.
Cortamos los ajos en láminas y reservamos.
Ponemos aceite en la sartén o wok, añadimos los ajos y dejamos que se doren un poco, ponemos un poco más de aceite y agregamos los piñones y las pasas escurridas, dejamos que los piñones se tuesten un poco y entonces vamos incorporando las espinacas, llenando la sartén y esperando a que bajen para poner ir colocándolas todas.
Rehogamos todo junto unos 5 minutos, añadimos una pizca de sal y en cuanto todas las espinacas hayan perdido el volumen y estén blandas retiramos del fuego, le agregamos un poco de pimienta negra recién molida, probamos y rectificamos de sal si fuera necesario.
En una sartén aparte freímos el pan de molde cortado en triángulos y lo ponemos acompañando las espinacas.
Con esta receta participo en el Reto de Septiembre 2016 de CdM - Cocineros del Mundo
en el apartado Salado ☛ http://cocinerosdelmundodegoogle.blogspot.com.es
en el apartado Salado ☛ http://cocinerosdelmundodegoogle.blogspot.com.es
¡Hola Concha!
ResponderEliminarHas conseguido plasmar de una forma absolutamente deliciosa, esta joya de la cocina tradicional catalana, que buen sabor y que saludable, ¡enhorabuena!
Un abrazo, feliz semana y muchísima suerte en el Reto♥
Muchísimas gracias Jose manuel!! No había visto tu comentario, me alegro de que te gustasen.
EliminarUn abrazo