martes, 20 de diciembre de 2022

Solomillo de cerdo curado en frigorífico

Tenemos la sana costumbre, de curar, adobar o marinar pescados en casa, lo hacemos con el salmón, el bonito y el atún. No habíamos probado aún el curado de la carne y nos animamos a probar con un solomillo de cerdo. El resultado ha sido francamente una delicia de sabor, nos atrevemos a decir que mejor que el lomo embuchado industrial, ausente de colorantes y conservantes químicos y por supuesto más económico.

La elaboración es facilísima, pero exige paciencia ya que el curado naturalmente precisa tiempo, de dos a tres semanas. También se puede curar lomo de cerdo, requerirá seguro al menos 3 semanas de curación al ser de mayor tamaño que el solomillo.

Para curar la carne en plan casero, los que vivimos en ciudades húmedas como Barcelona no podemos disponer de secadero. Hemos elegido hacer la mezcla de sal y azúcar al 50 % y el adobo posterior con un buen pimentón, romero y un toque de orégano en polvo antes del secado en frigorífico.

Cortado en lonchas lo hemos disfrutado como aperitivo mientras preparamos la comida con una buena cerveza o con una copa de vino. Será imposible no ir repitiendo esta receta con familia e invitados y si os apuntáis seguro que os pasará lo mismo.



Ingredientes:
Para el curado:
1 solomillo de cerdo, puede ser blanco o ibérico, cuanto más grande mejor.
500 gr. de sal gruesa
500 gr. de azúcar

Para el adobo:
Pimentón de la Vera dulce 
Pimienta molida, 
Orégano
Ajo en polvo
Romero fresco


Elaboración:

Mezclamos bien la sal y el azúcar.

En un recipiente en el que nos quepa bien el solomillo, sin que sobre mucho espacio, colocamos una cama no muy gruesa de la mezcla de sal y azúcar. Colocamos el solomillo y lo cubrimos completamente con el resto de la mezcla.

Lo presionamos bien y lo metemos en el frigorífico donde deberá estar entre 24 y 36 horas dependiendo del tamaño de la pieza. Nosotros lo tuvimos 24 horas. Al igual que con un pescado debemos vigilarlo a partir de las 24 horas, en cuanto la mezcla empiece a producir líquido y éste se vea en la superficie ya lo tendremos a punto para sacarlo.

Lo lavamos bajo el grifo para eliminar los restos de la salazón, lo secamos muy bien con un paño limpio o papel de cocina y reservamos.

Preparamos las especias y las extendemos en un plato grande o bandeja. Pueden ser según vuestro gusto y elección. Las más tradicionales son las que hemos usado, el pimentón dulce, la pimienta, el ajo en polvo, etc. Las mezclamos muy bien y ponemos el solomillo sobre ellas rebozándolo completamente.

En una gasa limpia o un paño fino, colocamos unas ramitas de romero fresco, sobre ello ponemos el solomillo y lo envolvemos cuidadosamente. Atamos con un hilo de cocina y lo dejamos en el frigorífico colocado sobre una rejilla, un vaso, etc., para que respire y airee durante unos 15 a 20 días, dependiendo del tamaño.

Tras unos quince días, en los que iremos girando la pieza cada día para que no esté apoyada siempre sobre el mismo lado, la sacamos de la nevera, la presionamos con los dedos y si nos gusta el punto de secado, retiramos la gasa y el hilo, dejamos que se atempere y cortamos en lonchas... Ummm

 



1 comentario:

Muchas gracias por tu visita!!