El mejor pastel salado, sin gluten y sin lactosa.
Debido a la globalización y el contacto entre personas en las redes sociales, los idiomas experimentan una mezcla e intercambio de palabras, incluso en los medios audiovisuales. La gastronomía no se libra de ello como se comprueba en el caso de los casi sinónimos cake, bizcocho, tarta, quiche, pastel salado o dulce, pan relleno, etc. Nos entendemos y aceptamos cualquiera de estos nombres hoy por hoy.
Coinciden casi todas estas palabras en definir este tipo de cocinado como: "Alimento blando dulce o salado elaborado con una mezcla de harina, grasa, huevos y otros ingredientes, horneado o frito y, a veces, glaseado o decorado".
La originalidad de esta preparación ha sido usar una legumbre, garbanzos cocidos, en lugar del cereal, harina; mejorando la cantidad de proteinas, fibra, vitaminas y minerales con efectos cardiosaludables y la ventaja para muchos de no llevar gluten ni lactosa.
Muy versátil ya que podemos usarlo como entrante, aperitivo, complemento, merienda,etc., y fácil de transportar! Su textura cremosa pero firme recuerda a la del cheesecake aunque su sabor no tiene nada que ver.
Convencidos de que en la variación está el gusto, seguro que disfrutaréis del sabor de este pastel salado, cake, etc ;-)
Ingredientes
400 g de garbanzos cocidos
4 huevos medianos1 cucharada de levadura química
Zumo de 1/2 limón
1 cucharada de curry en polvo
Pipas peladas de calabaza
Semillas de sésamo
Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta
Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta
Elaboración:
Escurrir los garbanzos y disponerlos en un bol. Incorporar 4 huevos, la levadura química, el jugo de medio limón, un par de cucharadas de virgen extra, el curry, la sal y un toque de pimienta. Batir muy bien con la batidora hasta obtener una mezcla cremosa.
Precalentar el horno a 180º C.
Cocinar en el horno precalentado durante 30 minutos aprox.
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