Sin bechamel ni huevo, de verano, realmente rápidas!

En estas croquetas, se combinan con el nutritivo y delicioso salmón, el queso ricotta y la patata para darles una textura suave, cremosa y consistente. Una mezcla que solo precisa para empanarse pan rallado y resulta muy sabrosa.

El salmón es uno de nuestros pescados favoritos. Es considerado uno de los pescados azules más saludables debido a su alto contenido de grasa y a la presencia de ácidos grasos omega-3. La cantidad de grasa influye en la coloración, así que gran parte de los pescados grasos tienen coloración externa azul, de ahí su nombre. En el caso del salmón, que sea pescado azul no se basa en el color de su piel, sino en su composición nutricional. Son peces que tienden a vivir en aguas frías y a realizar largas migraciones, lo que requiere una mayor reserva de energía, que le proporciona la grasa, de la que dispone en un porcentaje mucho más elevado comparado con los pescados blancos.

Muy popular en la cocina por su carne tierna y sabrosa, el salmón es el pescado más consumido en nuestro pais. Se puede cocinar a la plancha, crudo, asado, cocido; marinado o ahumado. Combina a la perfección con muchos ingredientes en mil y una recetas.

En los países nórdicos, donde reina el salmón, también preparan con él croquetas. Para resaltar el sabor del pescado, picado o en puré, añaden ingredientes como cebolla, mantequilla, harina, lácteos, y a veces huevo para darles consistencia. También pueden incorporar eneldo u otras hierbas aromáticas que son muy comunes en su gastronomía. Suelen empanarlas con pan rallado y freírlas hasta quedar doradas.

Ingredientes

250 g de salmón sin piel ni espinas

250 g de queso ricotta

(la proporción de queso y salmón es al 50% siempre)

1 patata cocida (grande)

1 cucharada de mayonesa

1 cucharada de zumo de limón

Pan rallado para rebozar

Sal y pimienta

Aceite de oliva para freir

Elaboración:

Cocemos la patata con piel en el microondas, 8 minutos a 800 w., o en agua hirviendo, la pelamos en caliente, la machacamos y reservamos.

Cortamos el salmón en trozos, sazonamos con sal y pimienta y lo picamos ligeramente con un robot o a cuchillo, que quede cortado grueso, no buscamos una pasta.

En un bol ponemos la patata cocida que habíamos aplastado previamente, agregamos el salmón picado, el queso ricotta, la mayonesa y el zumo de limón. Mezclamos todo para que se integren bien todos los ingredientes.

Cogemos porciones de la mezcla y formamos las croquetas, con dos cucharas pasando la masa de una a otra o sencillamente con las manos dando forma de bola.

Pasamos por pan rallado.

En una sartén ponemos a calentar abundante aceite y vamos friendo las croquetas hasta que estén doradas. Las vamos colocando en una fuente con papel absorbente para retirar el exceso de aceite. Las retiramos enseguida para que no se ablanden y las pasamos a la fuente de servir.

Pueden tomarse calientes, tibias o frías y acompañarse de ensaladas y salsas varias como por ejemplo la salsa de yogur, mahonesa casera, salsa tártara, etc.