miércoles, 25 de noviembre de 2020
Chips de yuca con sal y curry
miércoles, 18 de noviembre de 2020
Crema de chirivía y puerro con semillas de girasol
jueves, 12 de noviembre de 2020
Macarrones a la Amatriciana
El origen de esta receta se sitúa en un pueblo llamado Amatrice, perteneciente a la provincia de Rieti en la región italiana del Lacio.
jueves, 5 de noviembre de 2020
Falafel
El reto de Cooking The Chef este mes nos lleva a la época de la dominación musulmana en la península Ibérica, comprendida entre los años 711 y 1492, concretamente a recetas sobre la gastronomía de AL-ANDALUS.
Los árabes hicieron una aportación muy importante a la cultura gastronómica de aquellos tiempos, mejorando las técnicas de cultivo e introduciendo nuevos productos.
Somos muy fans de sus preparaciones e ingredientes, sobre todo según mi gusto, del montón de especias que enriquecieron nuestros platos y que usamos habitualmente en nuestra cocina. Hemos aprovechado este evento para preparar uno de sus platos más conocidos, el delicioso Falafel.
Esta elaboración tan popular es además de sencilla de realizar, muy sana. Su ingrediente principal es la legumbre cruda, normalmente los garbanzos aunque también se preparaba con habas secas.
El garbanzo hidratado adquiere una textura esponjosa por dentro y crujiente por fuera que nos ha sorprendido agradablemente.
Es típico acompañarlos con una Salsa de yogurt cuya receta podéis encontrar también en el blog.
300 gr. de garbanzos secos
1 cebolla mediana
1 diente de ajo
1/2 manojo cilantro fresco o más, al gusto
Perejil fresco
Sal
Pimienta negra molida
100 gr. de harina de garbanzos
5 gr. de levadura química
1 cucharada de comino molido
Aceite para freír
Una vez triturado, añadir la harina de garbanzos, reservando un par de cucharadas, y la levadura química. Salpimentar al gusto. Triturar de nuevo hasta obtener una mezcla homogénea. Pasar la mezcla a un recipiente y dejar reposar en la nevera durante 30 minutos.
Formar bolitas del tamaño de una albóndiga, aplastarlas un poco y colocarlas sobre una fuente previamente espolvoreada con la harina reservada, para que no se peguen.
En un cazo hondo calentar abundante aceite. Freír las bolas a fuego medio-alto sumergiéndolas unos minutos para que se doren por toda la superficie y se cocinen por dentro.
Colocar sobre papel absorbente una vez fritas y después servir acompañadas de salsa de yogurt.