miércoles, 28 de agosto de 2019

Salsa Chimichurri casera

La salsa Chimichurri es típica de Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay aunque se consume hoy en día en todo el mundo.

Lo tradicional es servirla con asados pero también es perfecta con pescados, verduras, etc. Es sencilla de elaborar, se prepara rápidamente y se puede conservar en el frigorífico varios días. 

Como siempre en la cocina cada cocinero aporta su personalidad y hay que quedarse con aquella receta que más se ajuste a nuestros gustos dentro de unos parámetros generales. Esta versión de Chimichurri  vi que la hacían en casa de un argentino, por la televisión. La receta se transmite en su familia de generación en generación. 

Dentro de las variaciones que he encontrado de esta salsa las hay que no ponen pimentón, otras agregan comino y tomillo, etc. Me quedo con esta opción porque la combinación de sabores se ajusta a nuestros gustos.

Después de prepararla en casa creo que es una opción muy fácil de elaborar y muy rica, así que ya está felizmente adoptada en mi casa. ;-)





Ingredientes
Abreviaturas: cda. = cucharada sopera - cdta = cucharadita de postre

2 cdas. de ajo picado (unos 4 dientes de ajo)
2 cdas. de perejil picado finamente
1 cda. de orégano seco
1 cdta. de ají triturado (o guindilla cayena)
1 cdta. de pimentón dulce
1 pizca de sal
1 chorrito de vinagre rojo
1 vasito de aceite de oliva virgen extra o cantidad suficiente hasta cubrir la mezcla


Elaboración:

Esta preparación se hace con sus ingredientes picados y mezclados sin más, pero si te gusta más fina  puedes machacarla en un mortero.

Picar el perejil y el ajo lo más finamente posible. 

Incorporar a un bol, añadir el resto de ingredientes y cubrir con el aceite de oliva virgen extra.

Probar, rectificar de sal y dejar reposar, cuanto más tiempo repose más se integrarán los sabores.




martes, 20 de agosto de 2019

Ensalada de brotes verdes con bacon, parmesano y croutons

Esta ensalada es una improvisación, podríamos decir que es una variante más de la Ensalada Cesar, de la que hablaremos en otro momento.

En principio pensé en hacer la famosa ensalada pero como no tenía en casa lechuga romana que es la base de esa elaboración, usé una bolsa de brotes tiernos que tenía en la nevera y le añadí bacon, pan frito y mis aliños.  Es simplemente una ensalada muy sabrosa, sin nombre, punto.

Puede ser un entrante muy completo, o perfecta para compartir acompañando a un plato principal. En mi caso hoy era una Pasta italiana rellena con parmesano y albahaca que publicaré en breve.

Un menú fácil y delicioso que os recomiendo.

Podéis encontrar otras ensaladas sabrosas en el blog, pinchando los enlaces que os dejo al final o en éste enlace de búsqueda:  Ensaladas






Ingredientes para 2 raciones

Brotes tiernos de lechugas variadas (1 bolsa de 125 gr.)
4 tomates cherry  
 2 lonchas de bacon o panceta curada (de 1/2 cm. de grosor aprox. cada una)
Queso Parmesano rallado al momento, al gusto
Aceitunas Kalamata (o la que prefiráis)
2 rebanadas de pan tipo chapata
Tomillo limonero fresco (un par de ramitas)
Vinagre de jerez
Aceite de oliva virgen extra
Ajo seco en grano o en polvo
Sal
Pimienta negra
Picatostes (pan en dados frito o asado en el horno) al gusto



Elaboración:

Lavar y cortar las lechugas y los tomates cherry. Si los brotes son de bolsa no será necesario manipularlos, se pueden usar tal como vienen.

Cortar las rebanadas de pan en dados pequeños.

Cortar las lonchas de panceta en tiras.

En una sartén con aceite de oliva freír el bacon ligeramente, retirar  y en el mismo aceite añadir los dados de pan y freírlos. Reservar.

En un bol poner dos cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra, añadir un poco de vinagre (al gusto), sal, pimienta y una pizca de ajo seco, en polvo o grano. Mezclar suavemente con un tenedor e inmediatamente incorporar las lechugas, los tomates y un poco de tomillo fresco. Con la ayuda de dos cucharas mezclar para que el aliño cubra bien todas las hojas.

Tanto si se hacen raciones individuales como si se sirve en una fuente, emplatar la ensalada poniendo  las lechugas en la base y agregando el pan frito, el bacon y las olivas. Para terminar rallar parmesano por encima de la ensalada o en un lado para luego mezclarlo.



Unas cuantas opciones más de ensaladas que encontraréi en este blog:

8 Ensaladas originales y sanas

Ensalada templada de habitas con jamón y berros

Ensalada de col roja (lombarda) marinada, con naranja y almendras - FRISK RØDKÅLSSALAT med appelsin og mandler

Ensalada tibia de lentejas, bacalao desmigado, aguacate y brotes tiernos, con sus aliños

Ensalada Diosa Verde de aguacate a la parilla y su salsa - Donal Skehan - Green Goddess Grilled 

 http://jugandoconlacocina.blogspot.com/2017/06/ensalada-de-bacalao-naranja-y-patata.html

Ensalada de quinoa roja con vegetales y pollo asados, inspirada en Donna Hay

lunes, 12 de agosto de 2019

Tartar de salmón y sus huevas - Dip o entrante

Un tartar de salmón a modo de aperitivo o como plato me apetece en cualquier época del año,  pero en verano con estas temperaturas tan altas que estamos teniendo es algo que agradezco infinito en la mesa. Este dip lo pensamos a partir de un reto #losviernesreto de Instagram, en el que no debíamos incorporar la soja como ingrediente y salió esta maravilla.

El salmón es un pescado que me fascina, tan versátil en la cocina que puedes prepararlo a menudo tanto crudo como cocinado, sin que se haga pesado por repetición. Tiene pocas espinas que además se quitan fácilmente y su carne firme se presta a muchas elaboraciones y métodos de cocción. Se puede comer crudo, marinado, en escabeche a baja temperatura, etc. 

Los ingredientes de este tartar son de sabores muy contrastados, la mayonesa de wasabi o el aceite de sésamo son potentes y hay que tener cuidado de no pasarse de cantidad a no ser que tengas el paladar acostumbrado a ellos, por eso las medidas que veréis en la receta son orientativas, lo mejor es ir incorporándolos y probando hasta ver nuestro punto idóneo. 

Precauciones a tener en cuenta con el pescado en general: 

Para comerlo crudo debes congelarlo al menos 5 días a -20 grados por si tuviera anisakis, que sólo se neutraliza de esta forma o cocinándolo a  más de 60 grados.

Cuando cocines el salmón has de controlar que no se pase de cocción porque es muy delicado en ese aspecto y si se cocina demasiado queda seco y pierde todo su atractivo.  





Ingredientes:

100 gr. de salmón fresco (previamente congelado)
Huevas de salmón
1 cucharada de aceite de sésamo
Aceite de oliva virgen extra - AOVE
Unas gotas de vinagre suave (de manzana, arroz, etc.)
1/4 cebolleta tierna
Germinados de puerro
1 cucharadita de semillas de sésamo negro  
Sal
Mayonesa de wasabi al gusto
Eneldo para adornar (opcional)




Elaboración:

Descongelar el salmón el día antes, lentamente, pasándololo del congelador al frigorífico.

Una vez descongelado trocear en dados pequeños y poner en aceite de oliva virgen extra al menos 30 minutos, guardar en el frigorífico de nuevo.

Cortar la cebolleta lo más pequeña posible. Reservar.

Hacer la mayonesa de wasabi, mezclando en la proporción de dos cucharadas soperas de mahonesa con 1 cucharadita de  pasta de wasabi. Mezclar hasta integrar las dos salsas. Reservar.

En un bol poner el salmón escurrido de aceite y añadir las semillas de sésamo, la cebolleta, el aceite de sésamo, el vinagre y la sal, Mezclar suavemente.

Emplatar con un aro como entrante o en presentaciones de aperitivo, por ejemplo como las cucharas de la foto.

Poner una cucharadita de mayonesa de wasabi como base, una capa del salmón aderezado y agregar una cucharadita de mayonesa de wasabi más en la cumbre y otra de huevas. Coronar con germinados de puerro. Adornar con unas hojitas de eneldo.





lunes, 5 de agosto de 2019

Pizzaimada Margarita o falsa pizza dulce de Christian Escribà

Esta Pizzaimada  de Christian Escribà es un auténtico trampantojo (trampa para el ojo) porque visualmente imita muy bien a la pizza Margarita. Lo más laborioso de hacer en una pizza es la masa y en este caso se sustituye por una ensaimada de pastelería, con la condición de que no lleve azúcar glass. Como resultado tenemos que es muy sencilla de hacer. 

Con ella participo en la repesca de verano del reto de Cooking The Chef en el que podemos recrear cualquier receta de los chef que hemos visto hasta ahora.

He variado un pelín el fondo de la pizzaimada de Escribá. El usa una salsa de frutos rojos tipo mermelada y yo aproveché mi Salsa de arándanos rojos que tenía en la nevera y que te recomiendo porque su punto de acidez combina a la perfección con el dulzor del conjunto.

Sorprenderéis de una manera sencilla y rica.




Ingredientes: 
Ensaimada de pastelería sin azúcar glass
Fresas frescas o fresones
Mermelada de frutos rojos
Chocolate blanco
Menta fresca



Elaboración:

Con las manos aplastar la parte central de la ensaimada dejando los bordes más elevados.

Colocar en el fondo una capa de mermelada de frutos rojos para que imite al tomate.

Rallar 25 gr. de chocolate blanco por encima como si fuera el queso.

Laminar las fresas disponiéndolas por encima para simular el pomodoro o tomate crudo.

Decorar con hojas de menta fresca a modo de albahaca.





Para ver las propuestas de mis compañer@s de reto  pincha aquí


jueves, 1 de agosto de 2019

Comer en Islandia - 12 días por su gastronomía

Islandia no es solo paisaje aunque eso es "lo más de lo más" en ese país, su gastronomía basada en alimentos naturales y sencillos pero de primera calidad, junto a su magnifica agua hacen que sus sopas contundentes, los pescados frescos, el cordero, etc., sean algo exquisito.

En este post voy a compartir con vosotros muchas de las comidas que hicimos en nuestro viaje por esa fantástica tierra, puntualmente algún lugar donde nos alojamos y también algún dato útil por si viajáis en Mayo, por ejemplo que vayáis vestidos por capas de ropa porque el tiempo es muy cambiante y la temperatura es fría, sobre los 8 grados C pero la sensación es inferior.

Nuestra ruta la completamos en 12 días, del 16 al 28 de Mayo de 2019 y tuvimos la oportunidad de conocer rincones maravillosos de la isla. Nuestro recorrido comenzó en el aeropuerto de Keflavik de donde partimos hacia el Circulo Dorado y terminó en Reykiavik, siguiendo la carretera 1, la Ring Road que rodea la isla.

La moneda islandesa es la Corona, (ISK o kr) en este momento (oscila cada día)  el cambio es de 1 € = 135,51  kr. Cuando nosotros viajamos estaba un poco más bajo pero he calculado los precios en función del actual. Si os interesa, en The Money Converter podéis consultarlo fácilmente. Nosotros no tuvimos necesidad de cambiar euros a coronas islandesas porque allí absolutamente todo lo puedes pagar con tarjeta y si en algún momento quieres hacer el cambio de moneda no tendréis ningún problema.

Un consejo para evitar las temidas comisiones bancarias es que llevéis una tarjeta de débito de las que no cobran comisión. Nosotros usamos la N26 en el viaje y  nos sirvió en todos los pagos.

Reykjavik

Entremos ya en materia culinaria ;-)

Se dice y es bastante cierto que comer en Islandia no es barato, pero todo es cuestión de adaptarse a las costumbres y elegir entre distintas opciones cada día.






La combinación que nosotros elegimos se divide en tres alternativas para ajustar el presupuesto:


1- Llevar algunos productos que no necesiten nevera desde tu lugar de origen, como embutido envasado o sopas instantáneas, etc. para hacer picnics y comprar en los supermercados. 

2-Comer en las gasolineras sus ricas sopas del día o sus Pylsa.
3- Darte un homenaje de vez en cuando en los restaurantes

De ese modo hemos hecho nosotros el viaje y ha quedado bastante compensado.





Hablemos de nuestras tres opciones:

Comprar en los supermercados:

Hacer picnics es necesario en el recorrido desde mi punto de vista.

Es fácil porque hay varias cadenas que puedes encontrar a lo largo del recorrido por la ruta R1. Bonus es la que más visitamos, es la cadena más económica (tiene un cerdito rosa en el logo) los precios son similares a los de Barcelona en los productos básicos y la calidad es muy aceptable para un viajero. (El alcohol, la cerveza, etc., es caro)


Los preparados instantáneos cuestan sobre unos 107 kr para 1 ración (0,80 € aprox.)

El embutido en sobres que llevamos desde Barcelona fue uno de nuestros elementos clave del viaje para los picnics, además del termo.



 El agua es la gran protagonista de toda la isla, por sus cascadas, ríos, manantiales, etc., discurre ante nuestros ojos constantemente y eso se traduce en algo muy positivo en la mesa, la calidad del agua de boca es extraordinaria, puedes llenar las botellas con agua del grifo en los hoteles y además en los restaurantes, cafeterías, etc., te la sirven completamente gratis, es mejor que la embotellada y no necesitas pedir otro tipo de bebida.

En la mayoría de los alojamientos había un hervidor de agua eléctrico, sobres de té y café soluble, muy útil para los viajeros porque si lleváis un termo lo podéis llenar por la mañana y disponer de agua caliente todo el día. Muy práctico para tomar una sopa o un té en cualquier momento teniendo en cuenta que atravesaréis muchos kilómetros sin ningún tipo de bar o algo parecido.

Skyr
Nosotros solíamos comprar en los supermercados, pan, zumos, y algún plato preparado que mezclar con agua pudiendo así tomar algo caliente entre destinos, cosa que siempre apetece por allí ya que aunque vayáis como nosotros en el mes de Mayo, hace frío.

Por supuesto si vais no dejéis de comer su fabuloso Skyr, un tipo de yogurt islandés que además de ser deliciosamente cremoso está elaborado con leche descremada y tiene 0% de materia grasa. Este descubrimiento fue un regalo inesperado.


Comer en las gasolineras:

Destacan sus ricas sopas del día o sus Pylsa (Hot dog) y su café.
Café para llevar

Hay varias cadenas de gasolineras, Olis, N1, etc., nosotros usábamos Olis porque al alquilar el coche en Cars Iceland nos dieron un llavero con el que nos hacían descuento en la gasolina y 1 café gratis al repostar. 

El café largo, para llevar, es algo que apetece mucho tener en tu vehículo e ir dando sorbitos calientes mientras circulas entre glaciares.

La primera cosa que probamos al llegar fueron sus famosas Pylsa,  unas salchichas al estilo Hot dog, muy típicas del país y que puedes encontrar fácilmente en áreas de servicio y kioskos en las ciudades. Un Pylsa completo y un café, nos costó 548 kr ó ISK (coronas islandesas).  Al cambio unos 4 euros.

Las Pylsa pueden estar elaboradas con carnes diversas como cordero, cerdo, etc., aunque generalmente son de cordero, si la pides completa te pondrán toda una serie de complementos como cebolla frita y cruda, salsa remoulade, ketchup, etc. El conjunto final es muy sabroso y en ningún caso adivinas qué tipo de carne es.





En estas áreas de servicio además de  los productos básicos alimenticios (que son un poco más caros que en el super) puedes comer sus Sopas del día, sandwiches, etc.

El agua es totalmente gratuita (y buenísima) en cualquier establecimiento cuando pides tus platos.

El alcohol es caro en estos locales, una cerveza en botella, la Viking normal cuesta 900 kr (unos 6 ó 7 euros) aunque en el supermercado Bonus puedes comprar latas de medio litro de Viking por ...199 kr, 1.50 € aprox.
Una de las sopas típicas del país que repetimos en dos lugares fue la Sopa de cordero.

Esta carne en Islandia tiene un sabor suave y saben cocinarla muy bien por lo que las sopas/guiso son muy sabrosas.

El primer menú de gasolinera que tomamos incluía una sopa de verduras muy densa, con su delicioso acompañamiento de pan y mantequilla y el agua por 1400 kr (10 euros por persona) En esa ocasión bebimos una Viking pero fue una excepción ;-)






En Islandia se dice que no hay delincuencia y realmente la sensación que tiene el viajero es de seguridad.

La confianza de los islandeses es destacable. Como curiosidad os diré que la primera noche nos alojamos en Reykholt, en The White House, una casa encantadora, limpísima y acogedora, digna de ser mencionada.

La puerta de entrada estaba abierta cuando llegamos. En la casa, decorada con mucho encanto, no había recepción, ni nadie para recibirnos, únicamente un mueble con un folio donde te explicaban todo lo necesario para alojarte con comodidad, no tuvimos ningún problema, todo estaba muy claro.  Allí mismo nos indicaban el lugar más cercano donde ir a cenar.






Un detalle del completo desayuno en The White House eran estas copas de Skyr con una riquísima compota de frutos rojos y una base de cereales, como podéis ver en la foto. Además había un surtido de embutidos, quesos y frutas capaz de satisfacer a cualquiera para desayunar.



Comer en restaurantes: 

También es una opción a tener en cuenta. Aunque más cara, tampoco es prohibitiva si eliges bien el local y el menú. 

Las sopas del día suelen valer sobre los 15 euros con sus guarniciones y el Cath of the day o pesca del día oscila dependiendo del producto y el local entre 20 y 30 € y las guarniciones que lo acompañan suelen hacer que sea un plato muy completo.

Salvo en ocasiones especiales, el precio promedio para dos personas osciló entre los 30 a 45 euros, pidiendo 2 ó 3 platos y quedando satisfechos.


A continuación os comento algunos de los lugares y las comidas más recomendables que probamos en nuestro viaje. En todos ellos la calidad era muy buena, las cantidades abundantes y el precio razonable. 


El alfabeto islandés es tremendamente complicado para nosotros, distinto a cualquiera de los que conocemos, pero afortunadamente todas las cartas están escritas también en inglés. 


El primer restaurante que probamos fue en Reyhold, cenamos en el Restaurante Mika, por recomendación del alojamiento.

Pedimos 3 platos, el más original fue el Cordero Ahumado/Grafið lamb/Cured Lamb, cortado como carpaccio, un plato muy sabroso. Los otros dos fueron una Bruschetta (tostada) de Setas de granja local con queso azul/Flúðasveppir Gráðostakremi y una pizza Hawaiana/Hawaiian Pizzur. Todo muy bueno. Costó 5825 kr, unos 40 euros.



En Vik, está el Icelandic Lava Show de The Soup Company, un local acogedor con un show que no llegamos a ver sobre la lava y donde comimos una sopa típica del local la Red Hot Lava Soup. La presentación imitaba a un volcán, sus ingredientes eran un pan moreno, vaciado de miga, que servía de recipiente, la sopa propiamente dicha por su consistencia parecía más bien un  goulash, era sabrosísima e iba acompañada de la miga del pan y el skyr islandés. Reconfortante y deliciosa.
Como podéis ver en la foto del menú esta maravilla de plato único con su agua y el siempre presente pan con mantequilla, costó 2390 kr (17 €)



Höfn es un puerto pesquero situado en el sudeste de la isla, famoso por sus cigalas. No podía irme sin probarlas e hicimos un "extra" en el presupuesto.
Entramos en uno de los restaurantes más conocidos del lugar, el Humarhöfnin y nos tomamos un fantástico plato, Whole langoustine and Tails, Roasted parsnip, Pistachio sauteéd kale, Curry beurre noisette, consistente en 6 cigalas, 1 entera y 5 colas limpias, acompañado de su guarnición y por supuesto el agua y  pan con mantequilla. Como era una comida especial nos permitimos pedir 1 copa de cerveza Einstök ;-)
Las cigalas (de extraordinaria calidad) costaron 6.600 ISK (y la cerveza 1.100 ISK, total 56 €.
Salimos de lo más contentos.






El mejor desayuno fue el del Hotel Stadarborg, en Breiðdalsvík. Juana nos preparó una preciosa mesa llena de exquisiteces, sólo para nosotros. Pescado ahumado, frutas, embutidos, quesos, huevos revueltos cocinados al momento y en otra mesa que no se ve en la foto, galletas, cereales, yogurt etc. Una maravilla.
Nos alojamos en una de sus bonitas cabañas en plena naturaleza y Arnór, el dueño islandés que habla perfecto español, nos atendió y ayudó en todo momento. Un lugar entrañable y bien de precio.




El siguiente restaurante en la ruta fue el de la guesthouse de Möðrudalur , Fjallakaffi. Probamos el delicioso Artic Char, un pescado de la familia de los salmónidos, jugoso y sabroso, que cocinan muy bien en toda la isla y un plato de verduras delicadamente asadas. Las cantidades son abundantes y los acompañamientos generosos, la cena salió por unos 25 € por persona.


En Mývatn comimos en la cafetería Kaffi Borgir del parque de Dimmuborgir, el dato curioso para nosotros era la pizarra que había sobre las marmitas de las sopas, "puedes comer toda las sopas que desees", había tres clases y todas muy buenas, además del pan, etc. etc. Añadimos una hamburguesa completísima y la comida nos salió por unos 15 euros por persona (4.400 kr)




Elegimos Húsavik para hacer nuestro avistamiento de ballenas, la excursión en el Salka Whale Watching nos costó 17.910 kr, unos 140 euros 2 personas, en el viaje en barco de 3 horas conseguimos ver delfines nadando muy cerca y un par de ballenas más alejadas. 
Cuando volvimos a tierra encontramos el Restaurante Gamli BAUKUR en el mismo puerto, que además de acogedor resultó tener una Sopa/Crema del día espectacular, era de coliflor y no sé que más llevaba pero era sabrosísima. Pedimos 2 sopas del día (de la que se puede repetir, ver la marmita en la foto) y un segundo plato, Bacalao con puré de boniato, pesto, trigo y ensalada, a compartir porque las cantidades son más que suficientes para  quedar satisfechos. El precio fue muy razonable, la sopa a 16oo kr y el segundo 2400 kr. Total  5.600 kr (unos 42 euros) 




El Hotel Rjúkandi en la peninsula de Snæfellsnes es un establecimiento con restaurante donde nos alojamos y cenamos. 'Olöf nos sirvió un auténtico Catch of the day (pesca del día) que consistió en un Artic Char (es un intermedio entre el salmón y la trucha asalmonada) capturado por su padre aquella misma mañana, una delicia que acompañaban con una base de verduras y salsas deliciosas. El otro plato consistió en Bacalao asado sobre una crema de mariscos que servían en una jarra aparte. Unos platos muy completos, con los habituales acompañamientos.  7470 kr (56 € todo)


Reykjavik tiene una variada oferta gastronómica. 
Las cigalas frescas, que ellos traducen al inglés como Loubster (Langosta) son una de sus especialidades. En el puerto encontramos un establecimiento famoso por su sopa de "langosta", el Sægreifinn un local que presume de tener la mejor sopa de langosta del mundo. Además tienen brochetas de pescados variados como þorskur (bacalao), Minke Whale y Hrefna (filetes de ballena). Nosotros nos conformamos con la sopa, realmente muy buena, con unas cuantas colas de cigala limpias y muy carnosas, llena de sabor y por el sorprendente precio de 1490 kr (unos 11.50 €) por bol, como siempre con su pan, mantequilla y agua.  


Si como a nosotros te gusta la cocina oriental no puedes perderte el delicioso ramen de Ramen Momo. El local es muy pequeño, dos barras con taburetes para unas 8-10 personas como mucho, pero la gente hace cola para entrar. Su fama es justificada, el ramen es delicioso y tardan poco en servir, los clientes dejan espacio en cuanto terminan y así la espera no se eterniza. Nuestra elección fueron el Nº 10-Icelandic con pescado y crema de langosta y el Nº12-Vegan Tantame con tofu marinado y aceites aromáticos. Los dos espectacularmente ricos. 1890 kr cada plato, unos 14 €,  incluimos una cerveza Viking y la cosa quedó en 4370 kr.  



No podíamos irnos de Reykiavik sin probar el Pylsur/Pylsa de Bæjarins beztu pylsur un kiosko cerca del puerto. Bill Clinton dijo que era el mejor Hod Dog que había probado nunca. De hecho la traducción de su nombre significa exactamente eso "El mejor pylsur de la ciudad". En la caseta siempre hay cola, pero como sólo sirven su famoso bocadillo la gente no se entretiene y no has de esperar mucho para que te sirvan. También tienen un espacio de mesas para poder sentarte a comerlo. Este bocadillo con sus guarniciones cuesta 470 kr (3,50 €) y la Coca Cola 270 kr. (2 €).  A la Coca Cola y demás refrescos los llaman genéricamente Soda.  

Bueno, reconozco que está muy bueno y es barato.


Después de el tente-en-pié del Hot Dog nos adentramos en el único mercadillo de Reikiavik, Kolaportið, una nave en la zona del puerto donde los fines de semana puedes encontrar de todo, desde ropa usada y nueva a objetos de segunda mano o comida. Las paradas de comida tienen los productos más famosos y emblemáticos de Islandia como su famoso Tiburón fermentado, huevos de distintas aves marinas, ahumados de todo tipo, carne de caballo, etc., un lugar curioso donde pasar un buen rato y comprar los mejores souvenirs.

Una multi-imagen vale mas que mil palabras.


Y la última comida de restaurante en Islandia fue en Keflavik, en el Restaurante Library Bistro/bar un lugar tranquilo, lleno de libros, decorado como una bibliotecaPedimos dos platos, en esta ocasión uno para cada uno, Tartar de Cordero para mi marido y Salmón plancha sobre verduras asadas, para mi, verdaderamente deliciosos y para rematar la estancia nos permitimos pedir 2 cervezas! Total de la comida 6440 kr. (48 €). Una buena despedida.    



Todo nuestro viaje fue una maravilla para los sentidos.

Para terminar nuestro recorrido gastronómico en el post nada mejor que brindar con una cerveza Einstök, muy vikinga y muy fresca. Esta imagen siempre nos recordará este inolvidable viaje.




Enlaces de interés:

Páginas donde encontrar información útil:

Guide to Icelandhttps://guidetoiceland.is/es
Islandia 24 - Noticias y viajes: https://www.islandia24.com/

Aunque el post está dedicado básicamente a la comida por la naturaleza del blog, quiero dejaros los enlaces de los alojamientos de nuestro recorrido por si os sirve de ayuda la información. Hice las reservas por Booking.

Todos fueron lugares recomendables, cumplieron con nuestras expectativas y en algún caso como el de The White House o el Hotel Stadaborg las superaron, por su relación calidad precio y por el trato personal del que disfrutamos. Las mejores experiencias fueron en las granjas y guesthouse. La única excepción fue el último hotel en Reykiavik, el 22 Hill, que aunque no era malo no fue lo que esperábamos.

Aquí os dejo los enlaces aunque tener en cuenta que dependiendo de la época y las ofertas los precios pueden ser diferentes:

The White House, en Reykholt  

 Hotel Katla by Keahotels, en Vik

Hali Country Hotel en Hali

Hotel Stadarborg en Breiðdalsvík

Fjalladyrd - Modrudalur á Fjollum en Modrudalur

Vallakot Farm Guesthouse  en Laugar

Hotel Kea by Keahotels en Akureyri

Gauksmyri Lodge en Gauksmyri

Hotel Rjúkandi en Vegamót

22 Hill Hotel en Reikiavik